... ¿Cómo podrá el joven mantener puro su camino?
¡Guardando tu Palabra! ...
Tomado del Salmo 119, verso 9
La pureza y la santidad están asociadas a la naturaleza del Creador, seguirle y buscarle no es sinónimo de santurronería o religiosidad.
Este salmo, atribuido al rey David plantea una pregunta que a diario se hacen millones de personas, cómo permanecer en el camino correcto?, cómo saber si estoy en los pasos adecuados?, cómo no dejarme arrastrar por una corriente que parece no detenerse? Cómo?
¡Guardando su Palabra!, en el momento que se escribió este salmo, no existía la Biblia como la conocemos, solo hablan sido escritos los primeros libros de esta por Moises con la instrucción o "torah", y otros varios. La realidad es que aquí PALABRA, no hace mención a los textos, este termino hace mención al hebreo "dabar", que traduce al español: una palabra; por implicación una cuestión (como se habla) de cosa; adverbialmente una causa: asunto, causa, crónicas, mandamiento, consejo, decreto, deber, lenguaje, mensaje, promesa, provisión o propósito.
Ahora, esta porción del Salmo 119, sigue así:
... Con todo mi corazón te he buscado; no dejes que me desvíe de tus mandamientos.
En mi corazón he atesorado tu palabra, para no pecar contra ti.
Bendito tú, oh Señor; enséñame tus estatutos.
He contado con mis labios de todas las ordenanzas de tu boca.
Me he gozado en el camino de tus testimonios, más que en todas las riquezas.
Meditaré en tus preceptos, y consideraré tus caminos.
Me deleitaré en tus estatutos, y no olvidaré tu palabra ...
